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El tiempo entre remiendos


Alguien en el PSOE, durante el akelarre reciente, lanzó el "meme" de que había que "coser el Partido", y una legión de portavoces se lanzaron a dirigir el taller de costura, repitiendo el mensaje sin mejor ocurrencia que la de hilvanar el desgarrón descomunal que ya existe desde hace mucho tiempo. Pero ese desgarro no es entre barones, dirigentes, secretarios o presidentes autonómicos. Ese desgarrón es entre la socialdemocracia y la política real de un PSOE, que ya en los noventa y antes, se metió en el laberinto de la "tercera vía", que en definitiva consiste en mantener unas siglas de izquierdas mientras que se hacen, cómodamente, políticas de derechas. Es lo mismo que hicieron Mitterrand, Blair, Schröder y, por supuesto, González, al que personalmente le ha ido muy bien. Un desgarrón que ya tuvo que vivir trágicamente Rosa Luxemburgo. Déjense de remiendos, de punto de cruz, de petit point o de vainica doble. Tiren el trapo y compren uno nuevo. No estamos para cosidos.

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